Las Directrices Básicas Comunes de Gestión Forestal Sostenible, aprobadas el 20 de diciembre de 2022, establecen un marco normativo y operativo para la planificación y gestión de los recursos forestales en España, en cumplimiento de compromisos internacionales y en el contexto de la normativa europea. Su propósito es garantizar un enfoque integral, que combine la conservación del medio ambiente con el desarrollo socioeconómico, promoviendo la multifuncionalidad de los montes. Se destacan criterios como la adaptación al cambio climático, la biodiversidad, y la integración de indicadores de sostenibilidad, que son esenciales para evaluar la efectividad de las políticas forestales. Además, se abordan los instrumentos de gestión necesarios para la ordenación y aprovechamiento sostenible de los montes, fomentando la colaboración entre las comunidades autónomas y la Administración central. Las recomendaciones incluyen la evaluación continua y la adaptación de estrategias para mejorar la gestión forestal y la conservación de ecosistemas, apuntando hacia un desarrollo rural sostenible y reglamentado.